Posibles escenarios de la viruela símica

Posibles escenarios de la viruela símica

Posibles escenarios de la viruela símica 275 183 Constanza Armas

Fuente: La Vanguardia

Desde el mes de julio de 2022 la viruela símica ha ido de baja en Europa, pero los expertos no esperan que desaparezca. El Centro Europeo de Control de Enfermedades (ECDC) lo atribuye a varios factores: la inmunización de muchas personas entre los grupos de más riesgo mediante vacunación; los esfuerzos en difusión y prevención de la infección, en que se implicó además el colectivo gay, y la disminución de grandes eventos culturales y festivos, como los festivales de verano, sobre todo los frecuentados por el colectivo más afectado.

Sin embrago, el ECDC ha publicado un análisis en que señala que lo más probable es que el virus persista, que siga causando infecciones, sobre todo entre el colectivo en que se han dado más contagios: los hombres que tienen sexo con hombres (HSH). Hay expertos que temen que el virus ya se ha vuelto endémico en países como España.

La infección (también conocida como monkeypox o MPX) es causada por un virus que desde hace varias décadas es endémico en una decena de países del África central y occidental y que inició un brote en Europa el pasado mes de mayo,  sin que se sepa cómo llegó (hasta entonces solo se habían dado algunos casos importados).

El brote empezó en el Reino Unido y España y se extendió al resto de Europa y el mundo. Se cuentan más de 20.000 casos en 29 países de la Unión Europea y el Espacio Económico Europeo (el que analiza el ECDC) y en torno a 70.000 en todo el mundo.

Cuatro posibles escenarios

El ECDC prevé varios posibles escenarios de ahora en adelante: que el brote se reavive; que el virus desaparezca solo (aunque no sería antes de al menos dos meses) o que se elimine de la región europea con la suma de esfuerzos que se hacen. Sin embargo, el escenario que considera más probable es que continue causando casos, un bajo número, y casi exclusivamente entre hombres que tienen sexo con hombres. Podría seguir habiendo brotes esporádicos favorecidos por actos masivos, viajes o por contagios en espacios grupales.

Es decir, que lo más probable es que la viruela del mono se ha convertido en endémica, al menos, en Europa y, sobre todo, en España, el país más afectado del continente.

Aunque a las organizaciones del colectivo LGTBI no les gustó que la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el ECDC les señalaran en este brote, el organismo comunitario insiste en que el mayor riesgo (aunque lo califica de «moderado»), la mayoría de los casos, todavía hoy, se siguen dando entre hombres de 18 a 50 años (el 87%) y principalmente son entre hombres que tienen sexo con otros varones. Según el ECDC, entre el 55% y el 90% de personas de este perfil aun serían susceptibles al virus. En el resto de población, considera el riesgo de contagio bajo.

Según el ECDC, el virus se ha hallado en las lesiones de la piel, pero también en las mucosas nasofaríngeas y las anales, la saliva la orina, la sangre y el semen. Sin embargo, hay discusión entre los científicos sobre si esta rara variedad de viruela debe considerarse de transmisión sexual -se contagia sobre todo por contacto con las pústulas que causa, directo o a través de la ropa u objetos- o bien si solo ocurre que su transmisión se ve favorecida por el contacto cercano que se da en momentos como las relaciones sexuales. Porque también hay contagios (pocos) por contacto no sexual.

El centro dependiente de la CE enfatiza que deben continuar los esfuerzos para frenar el virus, lo que incluye el diagnóstico precoz, el aislamiento de los infectados (21 días), la identificación y seguimiento de los contactos y la vacunación, que ahora se hace sobre todo a personas con más riesgo de adquirir el virus por tener prácticas sexuales de riesgo.

El ECDC señala que aún faltan más datos para ser concluyentes sobre la efectividad de la vacuna, que se ha estimado en torno al 79%. Se administra Imvanex de Bavarian Nordic (llamada Jynneos en EE.UU). Parece que la primera dosis, dice el ECDC,  ya ofrece protección contra la infección. Incluso la dosis reducida de 0.1 ml. La segunda dosis serviría solo para alargar esa protección en el tiempo. Pero no se sabe cuánto protege.